Tienes una fiesta, un casamiento, una cena de gala… Y necesitas un vestido fantástico. Empiezas a pensar en dónde comprarlo, en cuánto te vas a gastar y en lo poco que lo vas a utilizar… ¡Un momento! ¿Has pensado la posibilidad de alquilarlo? Aquí te ofrecemos seis buenas razones para que optes por esta segunda opción.
SOSTENIBILIDAD. La industria de la moda es la segunda más contaminante del mundo, y representa aproximadamente el 10% de las emisiones globales de carbono y casi el 20% de las aguas residuales. Por eso, si reducimos la compra de ropa y optamos por alquilar las prendas que solo utilizamos en ocasiones especiales, estaremos haciendo un favor al planeta y a nosotras mismas.
AHORRO. Sin duda, alquilar un vestido para una fiesta es mucho más barato que comprártelo. Y con lo que te ahorras podrías pagarte, por ejemplo, la peluquería y el maquillaje. ¿Te suena bien?
UN VESTIDO PARA CADA OCASIÓN. Si optas por alquilar, tienes la oportunidad de elegir el outfit perfecto para ese evento específico, nunca repetirás modelo y tendrás la posibilidad de ponerte un vestido nuevo para cada ocasión.
A TU MEDIDA. En Cinderella siempre vas a encontrar un vestido a tu medida. En cambio, aquel vestido que compraste hace dos años para el casamiento de tu hermana quizás te quede grande o chico la próxima vez que lo vayas a utilizar.
ÚLTIMAS TENDENCIAS. Si optas por el alquiler, se acabó eso de acumular en tu armario vestidos pasados de moda. ¡Si vienes a Cinderella siempre vas a ir vestida a la última!
OLVÍDATE DE LA TINTORERÍA. Tras la fiesta, ya no te tendrás que preocupar de llevar el vestido a la tintorería. Simplemente lo devuelves a Cinderella, ¡y te olvidas de su limpieza y conservación!